La Malahá, ubicada en el pueblo del mismo nombre, es una de las históricas salinas de Andalucía (fig.1). Su actividad no ha parado y hoy día continua siendo un referente para investigadores, consumidores y visitantes.
FIG. 1. VISTA DE LA MALAHÁ.
Fuente: TURGRANADA, 2017.
El pueblo y la salina se encuentran entre los arroyos Santapudia y Salado, cuyas aguas dan sal y vida al entorno (fig.2). De hecho, la historia del pueblo de la Malahá, está íntimamente ligada a la cosecha y uso de la sal, formando parte de la identidad de sus gentes. Según la clasificación establecida por Emilia Román (2014), la salina es además una de las pocas de carácter urbano, esto es, que se encuentra ubicada en el mismo espacio que la población.
FIG. 2. ARROYO SALADO.
Fuente: IDEAL, 2016.
El nombre de Malahá proviene del árabe Al-malaha, que significa "las salinas". No obstante el origen de su explotación es anterior a los musulmanes, encontrándose en la misma testimonios de actividad fenicia cuya sal sería empleada para las factorías de salazones de Almuñécar y Salobreña. El aljibe, las termas y necrópolis romanas demuestran que para los romanos tuvo gran importancia la producción y uso de sus aguas termales. Conviene señalar que recientemente y, vinculado al aprovechamiento de las aguas, la Asociación Termalismo de Andalucía promovió la puesta en valor y recuperación de la explotación termal de localidad. Por otra parte el famoso "torreón" de defensa, así como el puente de acceso son infraestructuras anexas típicas en las salinas (fig.3).
FIG. 3. PUENTE Y TORREÓN.
Fuente: TURGRANADA, 2017. Nota: El puente romano, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), está siendo sometido a un proceso de restauración.
Actualmente la explotación de salina es de carácter familiar. El alto volumen productivo, casi 1 T/año, se debe a que, si bien emplea la radiación solar y energía eólica, las instalaciones cuentan con maquinaria moderna para su cosecha: excavadoras y dumper. Por tanto, su producción no es artesanal (fig.4). El producto resultante es adquirido por la industria cárnica de la zona y panaderías, así como la estación de esquí de Sierra Nevada y su empleo para deshielo de carreteras.
FIG. 4. INSTALACIONES ACTUALES.
Fuente: Roman, E., 2014:778.
El patrimonio de la Malahá carece de la máxima figura de protección, el de Bien de Interés Cultural. Si bien es cierto que la mejor protección para una salina es el mantenimiento de su actividad, y la Malahá no ha parado desde hace siglos, ésta siempre queda sujeta a los designios del caprichoso mercado o los intereses productivos de sus dueños. Por tanto, atar de forma efectiva la conservación de dicho patrimonio mediante figuras de protección e implicación institucional se antoja como lo más efectivo y seguro.
BIBLIOGRAFÍA.
IDEAL. [en línea]. [Consulta: 7/5/2017]. Disponible en: <http://www.ideal.es/granada/provincia-granada/201409/03/salinero-pueblo-salado-granada-20140903004308.html>
QUESADA, T. “Las salinas de interior de Andalucía oriental: ensayo de identificación”, Granada : Actas del II Coloquio de Historia y medio físico. Agricultura y regadío en al-Andalus, 1996, pp. 317-333.
ROMÁN, E. Paisajes de la sal en Andalucía. Madrid : Universidad Politécnica (Tesis doctoral inédita), 2014. 858 p.
TERMALISMO DE ANDALUCÍA. "Termas romanas de la Malahá" [en línea]. [Consulta: 7/5/2017]. Disponible en: <http://www.termalismodeandalucia.com/>